Larraona Navarra/Nafarroa

Larraona, el municipio de los blasones

Noticia de www.revistacallemayor.es

Las fachadas de las viviendas de Larraona hablan del pasado. Un paseo por el caserío del municipio permite descubrir esparcidos en torno a una veintena de escudos, de los siglos XVI, XVII y XVIII. Algunos mejor conservados que otros y de diferentes tamaños, los blasones pertenecen a linajes amescoanos como los Ochoa de Baquedano, Álvarez de Eulate, Larramendi o los Albizu de Aranarache. Larraona, gracias a las casas palaciegas y a sus blasones, mantiene todavía vivo su sabor histórico.

“Larraona tiene en la actualidad 115 vecinos“

La primera mención que se tiene del término de Larraona data de 1071, con motivo de una donación. En 1192 obtiene privilegio del Rey Sancho, por el que se le exime del pago de impuestos por su posición fronteriza. Larraona aparece citada en la diócesis de Calahorra en 1257 y es firmante del pacto con Salvatierra en 1293. Entre el siglo XIII y el XV, Larraona es sometida a continuas agresiones y actos de bandidaje por parte de los Señores de Contrasta, en especial López de Lazcano. El 12 de mayo de 1813, el pueblo es saqueado por las tropas francesas en retirada que sustrajeron los elementos más valiosos de la iglesia parroquial y de la ermita de la Blanca.

El municipio de Larraona es el más occidental del valle de Améscoa y el último de Tierra Estella en esta zona. Linda con la provincia de Álava y, visible desde su término, se encuentra la vecina localidad de Contrasta, en el valle de Arana. El caserío se agrupa a lo largo de la carretera y en torno a la iglesia de San Cristóbal, de aspecto peculiar debido al macizo bloque desarrollado en horizontal del que apenas sobresale la torre. Junto a su perímetro se encuentra una lápida romana y varias estelas discoideas. 

Entre sierras

Larraona, al igual que el resto de municipios que componen Améscoa Alta, se localiza en una depresión estrecha y profunda entre la franja meridional de la sierra de Urbasa y el Monte Limitaciones y las estribaciones septentrionales de la sierra de Lóquiz. La proximidad a ambos enclaves naturales ofrece al municipio y a la zona una gran riqueza paisajística. Se trata de un valor que la plataforma en contra de la incineradora en Cementos Portland defiende en numerosas pancartas que se pueden ver colocadas en diferentes emplazamientos del municipio. 

Las calles de Larraona, estrechas, conducen hacia la parte alta del pueblo, donde se encuentra la iglesia. Junto a ella, un frontón abierto, con bancos en su alrededor, reúne en verano a los vecinos. Buena parte de las viviendas de la localidad están rehabilitadas y las calles se muestran en buen estado. En el núcleo de viviendas, junto a la carretera, se encuentran dos elementos de importancia: la fuente monumental y lavadero, perfectamente rehabilitados, y la bien conservada ermita de Nuestra Señora de la Blanca. En el término se conserva también un antiguo molino harinero de propiedad concejil. 

Larraona ronda en la actualidad los 115 habitantes, si bien la población aumenta considerablemente durante los fines de semana y las vacaciones, cuando regresan a la localidad los hijos del pueblo. No obstante, la tendencia es a la baja.  En los últimos diez años sólo se han construido cuatro casas destinadas a vivienda habitual pero, a la vez, son muchas las bajas, principalmente de jóvenes que dejan el pueblo. 

La localidad se encuentra bastante cuidado gracias a las reformas realizadas en los últimos tiempos y a la labor de auzolán, bien arraigada en la tradición de los vecinos, quienes se turnan, además, tareas comunitarias como la limpieza de las fuentes, la limpieza del consultorio o el reparto de papeles y notificaciones. Entre otras actuaciones, en 1996 se realizaba el abastecimiento en alta para los tres municipios de Améscoa Alta. En varias fases se está renovando la red de abastecimiento y saneamiento y la pavimentación de las calles, a falta de una última fase pendiente, previsiblemente, para 2012-2013. 

Asimismo, se ha rehabilitado la casa consistorial y se ha destinado uno de sus espacios a ludoteca y otro para el uso y reunión de la Asociación de Mujeres. También se ha rehabilitado un edificio de usos múltiples destinado al consultorio médico y al centro recreativo de Larraona. Anualmente se realizan, además, labores de mantenimiento del monte comunal, como caminos, pistas forestales, plantaciones y cierres. 

Tradición agropecuaria

La agrícola-ganadera es tradicionalmente la actividad con mayor presencia en el valle y en el municipio. En la actualidad existen explotaciones bovinas, de ovino, equino y porcino, que conviven con otras actividades relacionadas con el ocio, con una empresa de transporte de viajeros y un productor de queso. 

Larraona celebra sus fiestas patronales en honor de San Cristóbal el fin de semana posterior a la finalización de los sanfermines. Como curiosidad, y puesto que San Cristóbal es el patrón de los conductores, ese día, quienes tienen un coche nuevo lo llevan al frontón para recibir la bendición del párroco. Dentro del programa de las fiestas también se realiza una romería a la ermita de San Benito, situada en el Monte Limitaciones. Además, hace unos años los vecinos recuperaron el Día del Mayo, incluidas las antiguas vestimenta. 

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